Foto: "A la deriva", realizada por kleptØ, desde el puente de madera que da acceso al Maremagnum, en el día y hora señalados.
Hoy al mediodía, exactamente a las 14:03 de la tarde, hora local en Barcelona, klepto está a punto de comerse el bocadillo de jamón ibérico y pan con tomate que ha comprado por la mañana, acompañándolo con un café mocca, desde el Starbucks (y no me pagan por hacer propaganda), más espectacular de la ciudad condal, situado en el Maremagnum (tampoco me pagan), mientras se acomoda en el sillón y disfruta del sol cálido de invierno, y de las vistas sobre el puerto que ofrecen los grandes ventanales de dicho establecimiento, decide que es el momento de llamar y vaciarse,
kleptØ: ¿Qué tal estás?
vacío: ¡Hola!, pues estoy enfadado.
kleptØ: ¿Y eso?
vacío: Pues que el pack de la serie que me regalaste, con las 6 temporadas no está completo, le faltan al menos 3 capítulos por temporada.
kleptØ: Vaya… ¿recuerdas que ayer hablábamos de que habían abierto la temporada de caza mayor en la empresa?
vacío: Te refieres a que habían despedido a un directivo, y que mientras todos los “conejos se preocupaban por ver quién sería el próximo, le dieron a un oso grizzly”
kleptØ: Si… hoy antes de las 9:30 han despedido a seis más, un comercial, dos del costumer, de contabilidad un par, y uno que ocupaba una mesa a escasos dos metros de mí. Ha sido un desfile de despedidas, inesperado pero cantado.
vacío: ¿Y los jefes os han explicado algo?
kleptØ: Sí, claro. Han bajado han dicho que ellos son los primeros que peligran, que todo lo han hecho según la ley, que han pagado hasta el último céntimo a cada uno de ellos, y que si teníamos alguna pregunta.
vacío: ¿Y alguien ha preguntado algo?
kleptØ: No ha habido huevos… jajajajajaja. Si hubieran podido leer nuestras mentes, seguro que era un pensamiento unánime: ¿quiénes son los próximos y cuándo? Porque todos sabemos lo de la lista.
vacío: ¿Qué lista?
kleptØ: Ah, puede que eso no te lo hubiera comentado el otro día, existe una lista de 16 personas, o eso me dijeron hace un par de días pero pensé, será parte del bulo.
vacío: ¿Y tú cómo estás? Te noto irónica, pero no estoy seguro.
kleptØ: No te preocupes estoy bien, me acabo de comer un bocadillo impresionante, hace un día espléndido… y de momento lo puedo explicar desde el punto de vista de un observador de excepción. Son casi las 15:00, te dejo tengo que volver a la oficina.
Objetivos: Dicen los más avispados que han actuado así desde la dirección para que trabajara hasta el último momento, para que los pobres infelices no actuaran en perjuicio de la empresa si se les avisaba con antelación tal y como establece la ley. Unos que es por la crisis. Otros que han echado curiosamente a todos los de la empresa que se compró hace cosa de un año, porque ya habían prescrito las condiciones legales que se habían firmado en el momento de la absorción y podían actuar, y reestructurar sin problemas. Los rebeldes dicen que no son maneras de tratar a la gente, que hay maneras y maneras, que no somos perros y que los jefes de planta por no hablar del representante sindical (elegido a dedo), no deberían esconderse (cosa que hoy he descubierto se les da francamente bien). Los previsores ya han empezado a recoger sus cosas. Los optimistas han empezado a enviar currículums, los preocupados pero seguros de sus anclas han disimulado mal que mañana les puede tocar a ellos y han estado desconcentrados y afectados el resto del día. Lo cierto es que todos nos hemos quedado igual de acojonados como cuando ves pasar un tornado, y te quedas indemne mirando desde la ventana. ¿Yo?... me he ido al Maremagnum, hacía un día espléndido con un cálido sol de invierno.
Tiempo robado si has leído hasta aquí: Un bocadillo de jamón ibérico.
jueves, febrero 26, 2009