Me emocioné cuando hicieron este graffitti en 3-D, al lado de casa, enseguida quise escribir algo, cómo era aquello rompedor?... ah sí!, I was here, pero no pude, no recordaba cómo era escribir.
Olvidé escribir. Fue fácil, un día dejé los cuadernos y los bolis en un cajón, y lo cerré, para sellar mi olvido. Para eso sirven los cajones para almacenar. Todavía recuerdo esas clases jurásicas de informática, delante de sendos IBM's, donde nos explicaban cómo funcionaba C: almacenando todo en carpetas, como nosotros en cajones.
Y en verdad que a veces pasa, un día te encuentras redescubriendo estos cajones, y cuando los intentas abrir, se atascan a medio camino, es la venganza del olvido, la consecuencia lógica de haberlo dejado todo ahí tirado de cualquier manera, del palo no te quiero más en mi vida. Te lleva unos minutos encontrar lo que hace palanca, e intentar abrir sin destrozar, cabreos y forcejos más tarde, recuerdas por qué exhiliaste ese cajón de tu vida, tickets de cine, super ofertas de bocatas que nunca utilizaste, fotos... porque si hay algo que te acuse de manera inequívoca de que tuviste un pasado, eso son las fotos. Y tus diarios de hojas rosas, esos que escondías para que el monstruo que vivía en tu casa, no leyera, como hizo con aquel cuaderno primerizo de letra menuda. Porque un día amaste, otro te comportaste de manera infantil, otro te entregaste y otro caiste de bruces y cuatro patas, y encima lo escribiste... pero en qué estabas pensando!. Vuelves a cerrar el cajón, pero ahora lo colocas todo de forma ordenada, porque ahora eres más madura, y compruebas que puede abrir y cerrar sin problemas, porque ahora eres más sensata.
Te dices a ti misma que no pasa nada, que lo importante es seguir plasmando tus sensaciones, que incluso te apetece que te lean, porque te has dado cuenta de que no eres tan única como te pensabas, que esto no te pasa sólo a ti, y que no es que hayas descubierto ninguna novedad sino que la novata sigues siendo tu. Intentas coger el boli, pero el papel rechaza el trazo en un gesto que se te hace áspero, coges una pluma, pero como hace tanto tiempo que no la utilizas está seca, su punta otrora suave y gentil como un pincel, ahora corta el papel cual ágil cuchilla, te tiras al rotulador y ocurre lo peor... no reconoces tu letra, cómo te gustaban los puntos sobre la i, redondeados a lo Disney, o como puntos secos, o tal vez como guiones ladeados?. Y cómo preferías las letras?, en bloque, todas bien igualitas o preferías las cursivas. Si ya sé que eres zurda, pero nunca escribiste con el papel en perpendicular.
En un mundo donde las comunicaciones reinan en todas sus facetas, donde las faltas de ortografía parecen ya no ser tan importantes, sino que incluso son curiosidades, valoradas y catalogadas. Donde cualquier formulismo en masa, si es en pro de la comunicación, es digno de ser llamado diccionario, recuerdo aquellas clases de filosofía a las ocho de la mañana, con los rayos de sol luminosos pero no calientes filtrándose por entre las ramas de los árboles que enmarcaban las ventanas del aula, al profesor con nombre de caramelo, y oigo sus palabras, que ahora comprendo, pero que entonces simplemente anoté, en los márgenes de un cuaderno de cajón: "La tinta más indeleble es mejor que la memoria más retentiva". Objetivo: Sólo el tiempo me dirá si es mejor teclear aquí, que recuperar mi punto sobre la i.Tiempo robado si has leído hasta aquí: 3:07
confesó...
Veo para mi desazón, que no funciona el primer link de faltas de ortografía, quería hacer referencia al último libro de Asterix y Obelix, cuya falta de ortografía, en el título en la versión catalana, lo ha convertido en una rareza para coleccionistas.
Si a alguien le interesa, puede intentar copiar y pegar el link directamente:
http://melindro.com/index.php?op=ViewArticle&articleId=420&blogId=1
confesó...
Vuelvo a ser yo... exhiliada, sin "h", me he quedado cuando me he dado cuenta del horror ortográfico, ya lo dicen es de humanos rectificar y de sabios equivocarse...
ka! confesó...
Antes que nada, gracias por pasar a saludar a mi blog..
En cuanto a los puntos sobre las íes, estoy de acuerdo que esta rara nueva sociedad parece premiar a quien alardea de su ignorancia, el cuestionarte como escribías y como escribes ahora pasa a menudo..a mí tambien suele pasarme, tambien soy zurdo y pongo mis cuaderons en perpendicular...y los puntos sobre las íes se van en la medida en que tu escritura se hace parte de nuestro trabajo cotidiano...no?
confesó...
Gracias a ti por detenerte, a escribir y comentarme tus puntos sobre la i.
Y también zurdo, eso sí es casualidad o estadística, quién sabe...
Hasta otro leer, Ka!.... ^_^