Siempre te dicen que la vida hay que vivirla como si fuera a acabarse, porque es corta. Puedo deciros que lo que somos es "cortos de vista", y no hago alusión directa a mi miopía hereditaria. No. Tan cortos que no llegamos a ver el fin. Y cuando este nos atropella, ya es demasiado tarde. La vida sigue y tu, sólo puedes seguir viviendo. Pero ahora sí, plenamente consciente de que todo se acaba. Dos únicas decisiones te quedan por tomar:
1.- Te cerrarás a todo nuevo comienzo para que un nuevo fin no te llegue nunca... Visualicemos juntos un caracol, tal vez un erizo.
2.- O te aferrarás con uñas y dientes a vivir, a sentir, a volver a perder... Visualicemos una mesa de póker e imaginemos la adrenalina del último momento antes de poner boca arriba las cartas. Tan sólo levantando la esquina izquierda para adivinar la carta y controlar el júbilo que te sobreviene.
Esto que relato, se publica como favorito en la categoría de los Premios kleptØ : Ya me pongo la vaselina yo.
El Encuentro.
Un viaje en metro en una ciudad como Barcelona es la cosa más utilitaria y casi siempre aburrida por monótona. Siempre el mismo trayecto, a la misma hora, las mismas personas, con las mismas caras de no divertimento que tu, la misma madre con sus dos hijos, el mismo abuelo arrambador de culos jóvenes, el mismo pedigüeño disfrazado de músico. Siempre lo mismo.
Pero nadie te advierte que un simple cambio de línea de metro para hacer un transbordo, a la misma hora de siempre, supone un gran cambio en los hilos de tu destino. Por eso y a falta del tiempo por venir que todo lo cura y todo lo pone en perspectiva, todavía no se si fue mi ángel de la guarda o el diablillo travieso de turno quien me colocó en el andén de esa línea de metro, que no es la habitual. A la hora de siempre.
¿Cuántas probabilidades hay de encontrarte con alguien que conoce perfectamente tu rutina y que no espera verte ahí? ¿En una ciudad como Barcelona? Y... ¿Cuántas probabilidades hay de que te coloques aleatoriamente en el andén y cuando el metro entre y se pare... la puerta se abra como si fuera el telón de un teatro sólo para tus ojos? Ahí en tus narices.
Así fue. Como en las peores películas de bajo presupuesto. Esas que siempre critico por poco originales y sin recursos. Justo como la archifamosa frase: "La realidad siempre supera a la ficción".
La puerta se abrió y ahí estabas tu. Mi alegría inicial se desvaneció cuando entendí que no venías a buscarme "en plan sorpresa". Venías de comer con ella y no esperabas que yo estuviera ahí. Ella reaccionó rápido, mujer al fin y al cabo. La mentira salió de sus labios en forma de excusa. Quise creerle y le seguí la corriente. Pero tu semblante era serio y frío. Sin mirarme y sin levantar la mirada del suelo me ordenaste: "Vete a casa que voy al centro". Obedecí y me bajé. Una presión en el pecho se me instaló enseguida. Es una sensación que incluso hoy 15 días después, todavía noto a momentos. Tuve la sensación certera que no sólo me bajaba del metro, sino de tu vida.
El Después.
La negación ante lo evidente es automática, llevo 15 días intentando razonar en vano y en solitario, el por qué de todo. ¿Por qué has reaccionado como lo has hecho? Huyendo de todo y de mi. No tienes nada que decirme, dices. Estás vacío. Vacío. Te miro y no te reconozco. Es como ver el mismo envase de zumo de naranja rellenado con zumo de pomelo. A simple vista tiene el mismo color, pero no el mismo contenido. ¿Cuándo te convertiste en un pomelo?
La casa, mi casa... También parece la misma pero igual que el protagonista de Café de noche (por cierto, la tuvimos en futurama), Sean, me pregunto inútilmente: "Do you still live here? Check the pillow, check the towell, check the soap..." Debo confesar que aparte de la almohada que todavía huele a ti, tuve que lavar la toalla y esconder tu champú. Pero la crisis la tuve con tu cepillo de dientes, no podía seguir ahí. Mirándome cada mañana. Tuve que tirarlo. Lo siento tuve que hacerlo.
La Revelación.
Tuvieron que pasar 9 días desde nuestro encuentro en el metro, para que pudieras hablarme y quisieras escucharme. Comentarme parte de tu nueva realidad. Esa en la que ya no soy importante, ni siquiera figuro. Compartes conmigo tus fantasmas y demonios emocionales acumulados, como toda justificación. Me los echas encima y me presionan. Justo aquí en el pecho. Te recuerdo que por eso escribo. Hace tiempo que yo me liberé de los míos, pero eso tampoco lo entendiste. Ni entonces. Ni ahora. Tus sentimientos de culpabilidad y vergüenza, no estoy segura de si en este orden. Te superan y sobrepasan. Y es lo único que te importa. Eso, y jugar al monopoly con nuestras cosas.
Que yo haya tenido una crisis contemplando tu cepillo de dientes, que me haya entretenido tirando la comida de la nevera, viendo como anochece un día más, mientras sufría insomnio e hidrataba en exceso mis pupilas y mejillas con mis lágrimas, es irrelevante. Soy igual que esta casa, algo etiquetado como "pasado". Y así estoy atrapada en un presente que en realidad es un pasado y las fuerzas me flaquean para conjugar en futuro.
Descubro que me has utilizado como moneda de cambio emocional para interpretar el rol de hijo pródigo. Se te está dando mejor que nunca. En la boca siento un sabor amargo, debe ser el pomelo. ¿Cuántas sorpresas más me deparas? Comunicación, sinceridad, confianza, decías... Esfuerzos siempre conjuntos, predicabas... Tengo que darte la razón son palabras ahora vacías, sin sentido. Las repito en voz alta y suenan huecas. Ya no tienen eco.
Yo no debía estar ahí, a esa hora, en esa línea de metro. Y como toda revelación, tiene un precio. Muy alto: back to square one. El monopoly es lo que tiene.
Objetivos: Porque y como dice un muy buen conocido mío, desde hace días, meses y algún año: "Estamos condenados a vivir".
Tiempo perdido (¿invertido?) si has leído hasta aquí: Déjame consultar la agenda... El pasado día 28 de junio hizo para ser exactos... Sí correcto, tiempo estimado: 21 años, 6 meses y algún minuto.
Etiquetas: Premios KleptØ
confesó...
Dejo constancia para mi memoria caprichosa de:
El mensaje de un amigo:
"no te dejes caer coño! somos fuertes, usted lo sabe!"
El mensaje de un aludido:
"Lo acabo de leer. Siento haberlo hecho todo mal. Hago lo que puedo. Nada de lo que diga o haga te parece bien... Siento haber hecho daño. De verdad. Y me importa."
That's all folks!
ñ_ñ
confesó...
tu no perdiste el tiempo.
Tu lo ganaste.
El tipo del vagon es el perdedor. Y perdio mucho mas que "el tiempo", ni el blogspot aguantara la lista...
confesó...
Gracias anónimo, por el apoyo, es todo lo que necesito ahora.
Gracias también a todos los que me hacéis saber que puedo contar con vosotros para lo que sea, con mensajes que me hacen más fuerte, como éstos, que tampoco quiero olvidar:
Amigo/a 1:
"Aunque estoy en shock y no puedo creerlo, es como si no quisiera aceptarlo y me duele que tengas que pasar por algo así. Te admiro, y si él no puede verlo y no sabe darte el amor que te mereces, tampoco merece estar a tu lado."
Amigo/a 2:
"Ayer me sentí muy extraño/a leyendo algo que me parecía imposible que hubiera ocurrido. Ni hay nada que dure eternamente, como dices en el blog, ni por lo visto se puede poner la mano en el fuego por nada. Estuve toda la noche pensando si había algo que estuviera en mi mano hacer para hacerte recuperar a la persona confiada que siempre he visto. Pero eres una mujer inteligente y práctica. Que con todo tan reciente puedas escribir sobre la perspectiva que da el tiempo es señal de que eres una persona que no se abandona al dolor... (No todo el mundo es capaz de pensar en esa perspectiva, por más experiencias que hayan podido tener). Un abrazo enorme."
Amigo/a 3:
"Lamento mucho saber eso!! Al margen de lo que haya pasado, no me parece una actitud razonable y honesta, por parte de él.
Imagino que quiere dejar todo cerrado y cambiar su vida lo más rápido posible para evitar cualquier arrepentimiento. No querrá enfrentarse a lo que ya es su pasado por muchos motivos.
Lo siento por ti, porque sea como sea, no mereces un trato así.
Me alegra que recibas apoyos de los que te quieren y aprecian, además de ser una ayuda, contribuye a medir hasta que punto uno ha cultivado la empatía, el respeto y la amistad.
Mantente ZEN, acepta lo que te ha venido y aprende lo que necesites, tu sabes que saldrás airosa y que el tiempo te dará lo que deseas y necesitas. Un abrazo."
Gracias a todos de corazón, por vuestro apoyo... ñ_ñ
confesó...
Hace 2 semanas conocí a "la perfecta extraña", quien me ha enviado este mensaje, que también quiero compartir con vosotros:
"Tambien estoy contenta por haberte conocido y haber podido charlar un rato. Espero que poco a poco vaya mejorando tu situacion, tu estado de animo ... en fin, que la realidad supera la ficcion y que algun dia todo esto sera como una pelicula en la que ahora, por mala suerte, eres la protagonista. Cuidate mucho. Animos con todo lo que tienes encima,
he mirado un poco tu blog y me parece muy interesante
eres increible !!"
Gracias, gracias, gracias... ñ_ñ