I
- ¿En serio? - Dijo abriendo los ojos como platos, Ngama.
- Sí, por eso cada noche cruzan el estrecho los más bravíos, los más jóvenes, en busca de la buena fortuna que les permita garantizar comida, casa y prendas que heredar. Cada uno de ellos es la semilla de continuidad de sus respectivas familias, pero el camino está lleno de obstáculos y sólo unos pocos conseguirán superarlos, un día tal vez tú seas uno de ellos. Ahora duerme, ésta noche puede que veas a los renos pasar, sólo los elegidos pueden verles para así poder seguir su camino hasta el otro lado del estrecho.
Ngama se fue a dormir excitado no podía dejar de pensar en las palabras de su tía, y en cómo eran esas ciudades al otro lado del estrecho que eran tan ricas que ataban a sus mascotas con salchichas para que nunca pasaran hambre, como siempre que le preguntaba por su padre y su tío. Esa noche haría todo lo posible por ver de una vez por todas a los renos, su corazón le decía que él era uno de los elegidos. Se quedó dormido sobre su catre de madera hecho con restos de balsa, se lo había hecho su padre antes de marchar, para que el olor de mar le llevara en sueños a su lado. Esa noche un antílope macho mal herido, huía de las leonas de no ser por eso nunca se hubiera acercado tanto a un hogar humano en busca de refugio y calor, Ngama se despertó y miró tras la cortina de ramas secas que tapaba el agujero de la ventana, y entonces vio la cornamenta del antílope, se escondió enseguida del susto justo antes de que las leonas lo arrastraran de vuelta a la espesura de la maleza, su corazón latió con fuerza, supo con certeza que él también cruzaría el estrecho. Aquella Navidad años más tarde, cuando finalmente le concedieron su tarjeta de residencia explicaría que siempre lo supo desde el día que el reno vino a visitarle de noche cuando era todavía un niño, la gente se quedaba sin palabras al oír la incrédula historia por la convicción que emanaba de la más pura de las ilusiones.
II
- Ya que has tenido la oportunidad, apróvechala, no te vuelvas, aunque te digan.
- Sí eso pienso yo también, que tengo que aprovechar y ver pues.
- Aquí se sufre mucho, y venir aquí para una mujer representa perder su hogar, yo perdí el mío.
- ¿Sí?
- Si yo estuve muchos años llorando por mis niños y por mi marido, y sufrí mucho, me llevó tres años traérmelos a todos.
- ¿A su marido también?
- Sí y cuando ya estaba aquí, me dijo que ya no me quería y vivimos juntos pero como si fuéramos extraños, él hace su vida y yo la mía. Los únicos que me esperan en casa son mis hijos, que aquí sí les puedo dar, es duro y se sufre mucho pero puedes darles, por eso no te regreses, aprovecha. Aquí hay trabajo, si te cogen en una casa como interina en lugar de 800 € te pagan casi 1200 € - Magaly abre los ojos como platos al escuchar tanto dinero-, yo le puedo hablar de ti a mi jefa y a ver si hay trabajo con alguna de sus amigas, y luego hay agencias especializadas, las hay de ecuatorianas y hondureñas, vas a tener suerte ya verás.
- Eso espero. - Respondió tímidamente Magaly.
- En la próxima parada me bajo, si no tienes con quien pasar Nochebuena me llamas, y te vienes a mi casa, a mi me hubiera ido muy bien tener una amistad justo llegando, porque se pasa muy mal, se sufre pero también se gana.
- Ese que está ahí es mi padre y aquella chica mi prima. - Dijo Magaly, señalando a dos personas que se encontraban de pie en el autobús custodiando varios bultos y maletas que ostentaban plastificados de aeropuerto.
- ¡Ah qué bueno que hayas venido con alguien de la familia!, yo vine sola, bueno apunta mi número de teléfono y si cualquier cosa, me llamas o me vienes a visitar, y te ayudo a conseguir trabajo.
- Muchas gracias. - Contestó Magaly mientras anotaba los datos con ilusión de la que años más tarde todavía calificaría como la persona más sincera que se encontró recién llegando de Honduras, dos días antes de Nochebuena.
III
- ¿Todavía escribes?
- A ratos, no lo puedo forzar, ya sabes lo que dicen.
- Pues no, ¿qué dicen?
- Que no se puede forzar la creación, es algo que es un reflejo o una expresión del interior, pero se ha de tener interior. ¿Sabes algo de Francisco?
- No, creo que la quimio no le está sentando bien, ¿cambiamos de tema?
- Bueno perdona, por un momento que tenemos juntos a la semana, es normal que hablemos, que ya casi no lo hacemos, ¿queda mucho más por colocar?, me estoy cansando de estar aquí en cuclillas colocando regalos, menos mal que no nos íbamos a motivar éste año, que si no...
- Tienes razón pero es que crecen tan rápido, el otro día en el cole le dijeron que Santa Claus y los Reyes Magos no existen que somos nosotros.
- No me lo habías dicho, ¿por qué siempre soy el último en enterarme de todo?
- ¡Shhhhhhh, que nos va a oír!
- ¿Y qué le dijiste?
- ¡Que era mentira por supuesto!, me gustaría que viviera la ilusión un poquito más... pero no lo noté muy convencido.
En eso oyen unos pasos a sus espaldas, Oriol les está mirando enfadado, todo lo enfadado que puede estar una personita de ocho años que cree que le han mentido, entonces su padre se le acerca y le explica en voz tan baja que la madre apenas puede oír nada, y la cara de Oriol se ilumina de golpe, abriendo los ojos como platos, y se va saltando de alegría de vuelta a su cama.
- ¿Pero qué le has dicho? - Él se acerca y entre risas y al oído se lo explica.
- ¡Estás loco!, habrá que decirle la verdad.
- Hoy no... que viva la ilusión.
Objetivos: Al igual que a Ngama, Magaly y Oriol, que la ilusión os haga abrir los ojos como platos. ¡Feliz Navidad!
La primera parte está inspirada en la ilusión que cada noche viaja en patera desde las costas africanas con destino las costas españolas, la segunda en una conversación que escuché en el autobús hace un par de días y la tercera en el vídeo de youtube que me lo pasó Wisheast.
Tiempo robado si has leído hasta aquí: Algo más de 5 minutos.
wisheast confesó...
Os deseo que vuestros ojos siguan siendo los de un niño, se ven cosas increibles cuando mirar con inocencia. Di que si Klept0.
Un beso
Remo confesó...
Ilusiones...
Dí un golpe maestro al regalarle a mis sobrinos cuentos clásicos ilustrados, no salían de su asombro y dirigiéndome a sus padres les dije:
- Tienen mucho que leer por las noches de ahora en adelante.
Saludos con ilusión.
El Zórpilo.
confesó...
cuánta energía hay en tus textos, no me refiero a vitalidad sino más bien a esa belleza que se respira mientras leo
no puedo decir si uno me gustó más que el otro porque la poslectura me tiene un poco enternecido, y creo que eso es lo más importante, el vínculo inmediato y temporal que se forma entre autor y lector
honrado de ser tu lector...
sigámonos viendo, leyendo, percibiendo
Redmond Barry confesó...
Pensar en alguien más que en uno mismo cuando lo que se pretende es ser feliz en estas fechas, supone que nos encontramos ante una buena persona. Me gusta el de las empleadas de hogar, mucho.
Ya estoy aquí y soy feliz, que lo seas tú también.
Un beso
Mike confesó...
Me ha gustado mucho la conversación entre las ds mujeres, puesto que Reynosa es un lugar de población migrante y ese tipo de conversacines sn parte de mi cotidianidad. Abrazo de oso Vamp Sista!!!
confesó...
Me gusta, realidades tan diferentes unidas por la esperanza y la ilusión :)
Espero que pasases una feliz navidad, mucho mejor que la mía (que incluyó fiebre, tos y demás). Dame un par de días para recuperarme del todo y escribiré algo más inteligente ;)
confesó...
Wish, y mira que tú eres una experta en mirar siempre con ilusión, gracias wapa... ^_´
Sí señor, Zórpilo, a eso le llamo yo motivar a la lectura, ¡genial!... Ö_Ö
Ceudónimo, muchas gracias por haberte dejado robar unos minutillos y regalármelos en forma de mensaje. Tus palabras me han emocionado, y las agradezco enormemente. ª_ª
Redmond, qué grato es leer que alguien es feliz, me alegro de que lo seas y muchas gracias por tus buenos deseos. ^_´
Mike, eso era lo que intentaba hacer plasmar la cotidianeidad dándole un toque de ilusión. Otro abrazo... ¨¬¨
Clemen, debe haber una pasa o algo, en la tienda me entran cada dos por tres, tosiendo y con mocos, cuídate mucho, mucha sopa y líquidos y que te mimen!!!! ^.^
ka! confesó...
...y aunque este año en casa no tuvimos siquiera un pino (natural o sintético), brindis elaborados, o la alegría o los pleitos de otros años...pues...estuvimos juntos, nos abrazamos..y pudimos ver la cara de lso sobrinos 7 al abrir sus regalos...
Amiga mía, parto hoy a la segunda parte de mi navidad...becho! y feliz año!!
confesó...
Algún día te contaré un secreto sobre ese vídeo de Youtube.
confesó...
Ka!, gracias amigo, te deseo lo mejor para el año entrante, y que te lo pases fenomenal en la segunda parte, ¡ya explicarás!. Becho, Ö_Ö
Shere, vaya manera de dejar en ascuas al personal, esperaré esa gran revelación... ^.^